La Liposucción ultrasónica externa (LUE) es uno de los avances técnicos que complementa a la liposucción tradicional. Con su aplicación se consiguen resultados más homogéneos, un postoperatorio más rápido y sencillo, aumenta la cantidad de grasa extraída y favorece la adaptación de la piel a la nueva forma.

¿En qué consiste la técnica?

Es la aplicación de ultrasonidos a través de un transductor que nos permite debilitar los acúmulos grasos subcutáneos.

Con un gel protegemos la piel, sin necesidad de incisiones. Esto facilita la posterior extracción de la grasa de forma más sencilla y menos traumática con baja presión de aspirado. De este modo se produce una mínima afectación del tejido circundante pudiendo aspirar mayores cantidades de grasa y sin lesionar los vasos sanguíneos y nervios periféricos.

¿En qué casos está indicada la LUE?

Está técnica hace más efectiva la liposucción tradicional, es un complemento a la cirugía.

Los candidatos idóneos son los mismos: personas de peso relativamente normal que poseen acúmulos de grasa localizados y con una piel firme y elástica.

Ventajas sobre otras técnicas

Con respecto a la liposucción tradicional:

  1. Rápida y mejor recuperación postoperatoria (menos dolorosa).
  2. Al actuar únicamente sobre la grasa se puede extraer mayor cantidad de esta ya que produce menor sangrado.
  3. Mejor resultado en tejidos grasos fibrosos (espalda, caderas, tórax y en hombres).
  4. El porcentaje de reintervenciones para retoques es menor, ya que se disminuye el riesgo de producir ondulaciones.

Con respecto a la liposucción ultrasónica interna

  1. Las incisiones son más pequeñas y con ello también las cicatrices.
  2. La piel se recupera mejor y provoca un aumento de retracción.
  3. El riesgo de producir quemaduras y seromas (acumulación de líquido) es más bajo.
  4. Preparación para una LUE
  5. El paciente deberá preparar la piel y mantenerla hidratada previamente a la técnica.
  6. Debes evitar fumar los días previos y posteriores a la cirugía, ya que entorpece el proceso de cicatrización y oxigenación de los tejidos.
  7. Necesita una programación correcta de la cirugía, planificándola con la mayor antelación posible.
  8. Las consultas previas con el cirujano son indispensables, ya que se analizará la salud del paciente, localizar los acúmulos de grasa y valorar la condición de la piel.
  9. El cirujano explicará los diferentes medios para lograr el objetivo e indicará cuál es la mejor técnica en cada caso.
  10. Se realiza una historia médica, cuyos datos son totalmente confidenciales, en la que se recoge información acerca de los hábitos de la paciente.
  11. Para el estudio del caso se realizan unas fotos preoperatorias y postoperatorias para estudiar y valorar la evolución.
  12. Para que no se olvide ningún detalle, el cirujano entregará unas instrucciones específicas previas a la cirugía que junto a unos consejos útiles genéricos harán que todo el tratamiento y el resultado final sean mejores.
  13. Si se detecta alguna alteración o el Cirujano valora que las condiciones deben mejorarse, se indica a la paciente la solución al problema antes de abordar la cirugía (medicaciones, dietas, pérdida previa de peso…).
  14. Y en caso de que la paciente padeciese un resfriado o algún tipo de infección, por seguridad y mejor resultado, la cirugía se pospondría.

La anestesia

Se realiza un estudio preoperatorio para minimizar los riesgos. En caso de necesitarlo, se administrará algún tratamiento (complejo vitamínico, suplementos de hierro) para preparar adecuadamente al paciente

Es una de las dudas que más inquietudes provoca, el tipo de anestesia usada depende de cada caso y se personaliza con cada paciente. Depende de la extensión, localización y tiempo estimado de intervención. Para zonas pequeñas y localizadas utilizaríamos una anestesia local y sedación, aunque hay casos que aconsejamos la anestesia epidural. Para grandes liposucciones o en diferentes zonas es aconsejable una anestesia general, por supuesto realizada por Especialistas experimentados y supervisada segundo a segundo. 

El día después

Para conseguir una mayor retracción de la piel (adaptación de la piel a la nueva silueta) aconsejamos el uso de una faja de ortopedia durante cinco semanas. En ocasiones, para facilitar el trabajo a la piel de “rodear” el nuevo contorno, el paciente deberá llevar un vendaje elástico los primeros 20 días.

Gracias a esta técnica, la hinchazón y acúmulos de líquidos son mínimos al igual que las molestias y si aparecen son totalmente transitorios.

La recuperación en general mejor y más rápida con respecto a la liposucción convencional.

¿Debo seguir algún tratamiento postoperatorio? ¿Es doloroso?

 entregaremos unas instrucciones y recetas en las que aparecen los medicamentos y consejos para una mejor recuperación. Es raro que no se controlen las molestias con el tratamiento que impartimos.

Además se dispone de un teléfono de atención directa que permanece abierto 24 horas para atender las dudas o problemas que puedan surgir.

Tiempo de recuperación. Calendario

Se puede (y debe) caminar desde el primer día. Los primeros 15 días del postoperatorio se estará en reposo relativo, una vez pasado este tiempo el cirujano aconsejará empezar a hacer ejercicio de forma activa tan pronto como sea posible.

La incorporación al trabajo, según los casos, será alrededor de la primera semana posterior al tratamiento.

¿Cuándo empiezo a notar resultados?

La diferencia es notable pronto, aunque los resultados se verán de forma más visible pasada le quinta semana, cuando la inflamación haya cesado.

El paciente disfrutará más su nueva figura, pudiendo lucir prendas que antes no hacía.

Para mantener este resultado de una forma permanente se aconseja un poco de ejercicio y una alimentación sana y variada.

¿La intervención se realiza en un hospital?

Se lleva a cabo siempre en un hospital o en una clínica para garantizar la mayor seguridad. Dependiendo del volumen que haya sido extraído, el/la paciente permanecerá ingresado/a en la clínica.